Rondalla
En esta noche clara
de inquietos faroles
lo que yo te quiero
te vengo a decir.
Mirando que la luna
extiende en el cielo
su pálido velo
de plata y zafir.
En mi corazón siempre estás
y ya no he de olvidarte jamás.
Porque yo nací para ti
y de mi alma la reina serás.
En esta noche clara
de inquietos faroles
lo que yo te quiero
te vengo a decir.
Abre el balcón y el corazón
mientras que pasa la ronda,
piensa mi bien que yo también
siento una pena muy honda.
Para que estés cerca de mí
te bajaré las estrellas
y que esta noche dormida
será de mi vida mi noche de amor.
(
Se repite todo)
Autor:
Alfonso Esparza Oteo
Fonseca
!Adiós, adios, adiós,
aulas de mi querer,
donde con ilusión
mi carrera estudié:
adiós, mi universidad,
cuyo reloj
no volveré a escuchar.
Las calles están mojadas
y parece que llovió,
son lágrimas de una niña,
llorando está por su amor.
Triste y sola,
sola se queda Fonseca,
triste y llorosa
queda la Universidad.
Y los libros,
y los libros empeñados
en el Monte, en el Monte de Piedad.
No te acuerdas cuando te decia
a la pálida luz de la luna,
yo npo puedo querer más que a
una (¡docena!)
yesa una, mi vida, eres tú.
Triste y sola..
Adiós con el corazón
Adiós
adiós con el corazón
que con el alma no puedo;
y al despedirme de ti
de sentimiento me muero.
Tú serás el bien de mi vida,
tú serás el bien de mi alma,
tú serás el pájaro pinto
que alegre canta por la
mañana.
No te puedo querer
No quiero que me supliques
que yo te quiera
no quiero verte llorar
ni quiero que pases pena;
despreciaste mi cariño
cuando yo te lo entregaba
y un cuchillo me clavabas
en mitad del corazón;
lo mismo que estás sufriendo
yo también por ti sufrí
hazte cuenta que me he muerto
y no te acuerdes de mí.
No te puedo querer,
porque no sientes lo que yo siento.
No te puedo querer
apártate de mi pensamiento.
Un día te quise
y al verme llorando
tú te reías de mi padecer;
ahora es tarde no hay remedio
ya no te puedo querer.
Yo bien quisiera quererte
pero no puedo
la culpa no tengo yo
ni mando en mi sentimiento;
tú jamás podrás negarlo
que te quise ciegamente
y que esclavo estuve siempre
de tu gusto y voluntad;
si ahora ya no te quiero
no te debes de quejar
que te pago con moneda
que me enseñaste a acuñar.
No te puedo querer,
porque no sientes lo que yo siento.
No te puedo querer
apártate de mi pensamiento.
Un día te quise
y al verme llorando
tú te reías de mi padecer;
ahora es tarde no hay remedio
ya no te puedo querer.
Letra:
M. Vaucaire
Madrid
Cuando llegues a Madrid, chulona mía,
voy a hacerte Emperatriz de Lavapiés,
y alfombrarte con claveles la Gran Vía,
y a bañarte con vinillo de Jerez.
En Chicote un agasajo postinero,
con la crema de la intelectualidad;
y la gracia de un piropo retrechero,
más castizo que la calle de Alcalá.
Madrid, Madrid, Madrid,
pedazo de la España en que nací,
por algo te hizo Dios,
la cuna del requiebro y del Schotis.
Madrid, Madrid, Madrid,
en Méjico se piensa mucho en ti;
por el sabor que tienen tus verbenas
por tantas cosas buenas
que soñamos desde aquí;
y vas a ver,
lo que es canela fina,
y armar la tremolina,
cuando llegues a Madrid.
Madrid, Madrid, Madrid,
pedazo de la España en que nací,
por algo te hizo Dios,
la cuna del requiebro y del Schotis.
Madrid, Madrid, Madrid,
en Méjico se piensa mucho en ti;
por el sabor que tienen tus verbenas
por tantas cosas buenas
que soñamos desde aquí;
y vas a ver,
lo que es canela fina,
y armar la tremolina,
cuando llegues a Madrid.
Autor:
A. Lara
Perfidia
Mujer,
si puedes tu con Dios hablar,
pregúntale si yo alguna vez
te he dejado de adorar.
Y al mar,
espejo de mi corazón,
las veces que me ha visto llorar
la perfidia de tu amor.
Te he buscado donde quiera que yo voy,
y no te puedo hallar,
para qué quiero tus besos
si tus labios no me quieren ya besar.
Y tú,
quién sabe por dónde andarás,
quién sabe qué aventura tendrás
qué lejos estás de mí.
Mujer,
si puedes tu con Dios hablar,
pregúntale si yo alguna vez
te he dejado de adorar.
Y al mar,
espejo de mi corazón,
las veces que me ha visto llorar
la perfidia de tu amor.
Te he buscado donde quiera que yo voy,
y no te puedo hallar,
para qué quiero tus besos
si tus labios no me quieren ya besar.
Y tú,
quién sabe por dónde andarás,
quién sabe qué aventura tendrás
qué lejos estás de mí.
Autor:
Alberto Domínguez
Yo vendo unos ojos negros
Yo vendo unos ojos negros
¿quién me los quiere comprar?
los vendo por hechiceros
porque me han pagado mal.
Los ojos de mi morena
tan negros como el carbón,
me tienen como en cadena,
atado mi corazón.
Más te quisiera
más te amo yo
y toda la noche la paso
suspirando por tu amor.
Más te quisiera
más te amo yo
y toda la noche la paso
suspirando por tu amor.
A veces dan esperanza,
a veces me hacen dudar,
a veces me dan confianza,
y no sé cómo acertar.
Por eso los ojos negros
los quiero pronto vender,
a ver si por los senderos
aprenden lo que es querer.
Más te quisiera
más te amo yo
y toda la noche la paso
suspirando por tu amor.
Más te quisiera
más te amo yo
y toda la noche la paso
suspirando por tu amor.
Adaptación y arreglos:
M. Salina
Mocita, dame un clavel
Mocita, dame un clavel,
dame un clavel de tu boca.
que para eso no hay que tener
mucha vergüenza ni poca.
Yo te daré un cascabel,
te lo prometo, mocita,
si tu me das esa miel
que llevas en la boquita.
Clavelitos, clavelitos,
clavelitos de mi corazón,
yo te traigo clavelitos
colorados igual que fresón.
Si algún día clavelitos
no lograra poderte traer,
no te creas que ya no te quiero,
es que no te los pude coger.
La tarde que a media luz
vi tu boquita de guinda,
yo no he visto en Santa Cruz
una boquita más linda;
y luego al ver el clavel
que llevabas en el pelo,
mirándolo creí ver
un pedacito de cielo.
Clavelitos, clavelitos.....
Yo te diré
Yo te diré
por qué mi canción
te llama sin cesar
me falta tu risa
me faltan tus besos
me falta tu despertar.
Yo te diré
por qué en mi canción
se siente sin cesar
mi sangre latiendo
mi vida pidiendo
que tú no te alejes más.
Cada vez que el viento pasa
se lleva una flor,
pienso que nunca más
volverás mi amor.
No me abandones nunca
al anochecer
que la luna sale tarde
y me puedo perder.
Y así sabrás
por qué en mi canción
te llamo sin cesar
me faltan tus besos
me falta tu risa
me falta tu despertar.
Yo te diré
por qué mi canción
te llama sin cesar
me falta tu risa
me faltan tus besos
me falta tu despertar.
Yo te diré
por qué en mi canción
se siente sin cesar
mi sangre latiendo
mi vida pidiendo
que tú no te alejes más.
Cada vez que el viento pasa
se lleva una flor,
pienso que nunca más
volverás mi amor.
No me abandones nunca
al anochecer
que la luna sale tarde
y me puedo perder.
Y así sabrás
por qué en mi canción
te llamo sin cesar
me faltan tus besos
me falta tu risa
me falta tu despertar.
Letra:
E. Llovet
Música:
J. Halpern
Carrascal
Carrascal
Carrascal, carrascal,
¿qué bonita serenata?
Carrascal, carrascal,
que me estas dando la lata.
Yo estoy loco de contento
porque me ha hecho mi madre
unos pantalones nuevos
con los viejos de mi padre.
Carrascal, carrascal,...
Caminito de Antequera
preso llevan a un gitano,
porque se encontró una capa
antes de perderla el amo.
Carrascal, carrascal,...
Cuando se muera mi suegra,
que la entierren boca abajo,
porque si quierte salir,
que se meta más abajo.
Malagueña salerosa
Qué bonitos ojos tienes
debajo de esas dos cejas
debajo de esas dos cejas
qué bonitos ojos tienes
Ellos me quieren mirar...
pero si tu no los dejas
pero si tu no los dejas
ni siquiera parpadear....
Malagueña salerosa
besar tus labios quisiera
besar tus labios quisiera
Malagueña salerosa.
Y decirte niña hermosa
que eres linda y hechicera
que eres linda y hechicera
como el candor de una rosa.
Si por pobre me desprecias
yo te concedo razón...
yo te concedo razón...
si por pobre me desprecias.
Yo no te ofrezco riquezas
te ofrezco mi corazón...
te ofrezco mi corazón...
a cambio de mi pobreza.
Malagueña salerosa
besar tus labios quisiera
besar tus labios quisiera
Malagueña salerosa.
Y decirte niña hermosa
que eres linda y hechicera
que eres linda y hechicera
como el candor de una rosa.
Letra:
P. Galindo - E. Ramírez
Música:
E. Ramírez
Me he de comer esa tuna
Guadalajara en un llano,
México en una laguna;
Guadalajara en un llano,
México en una laguna;
me he de comer esa tuna
me he de comer esa tuna
me he de comer esa tuna
aunque me espine la mano.
Ya se secó el arbolito,
donde dormía el pavo real...
ya se secó el arbolito.
donde dormía el pavo real...
y ahora dormirá en el suelo
y ahora dormirá en el suelo
y ahora dormirá en el suelo
como cualquier animal...
Dicen que soy hombre malo,
malo y mal averiguado;
dicen que soy hombre malo,
malo y mal averiguado;
porque me comí un durazno
porque me comí un durazno
porque me comí un durazno
de corazón colorado.
L'águila siendo animal...
se retrató en el dinero;
l'águila siendo animal...
se retrató en el dinero;
para subir al nopal...
para subir al nopal...
para subir al nopal...
pidió permiso primero.
Arreglos:
Luis Mars
Mira que eres Linda
Mira que eres linda
que preciosa eres,
verdad que en mi vida
no he visto muñeca
más linda que tú;
con esos ojazos
que parecen soles,
con esa mirada
siempre enamorada
con que miras tú.
Mira que eres linda,
que preciosa eres
estando a tu lado
verdad que me siento
más cerca de Dios;
porque eres divina
tan linda y primorosa,
que solo una rosa
caída del cielo
fuera como tú.
Mira que eres linda
que preciosa eres,
verdad que en mi vida
no he visto muñeca
más linda que tú;
con esos ojazos
que parecen soles,
con esa mirada
siempre enamorada
con que miras tú.
Mira que eres linda,
que preciosa eres
estando a tu lado
verdad que me siento
más cerca de Dios;
porque eres divina
tan linda y primorosa,
que solo una rosa
caída del cielo
fuera como tú.
Autor:
Julio Brito